Ser reconocidos como una unidad educativa de excelencia en el marco de una escuela inclusiva que, junto al trabajo comprometido y participativo de la familia, guía la formación de estudiantes con principios y valores cristianos, con un alto nivel académico, respetuosos, reflexivos y críticos, conscientes de sus habilidades y competencias reflejadas en su capacidad de desarrollarse en el medio natural, social y cultural, tanto a nivel local como global.